Esta guardería está decorada con vinilos ácidos con impresión ecosolvente.
Lo especial es que los dibujos tienen visión por los dos lados y están pegados por el interior del cristal. Al tratarse de vinilo acido, se garantiza que la guardería tenga una luminosidad casi idéntica al cristal sin decorar, pero protegiendo a los peque de las miradas indiscretas. Como la visión esta reducida, los papas pueden estar en la puerta esperando a los peques y estos tampoco los ven, evitando así los nervios en el momento de recoger a los niños.
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